CUADRANTE   POLITICO  

POR  FERNANDO  ACUÑA  PIÑEIRO

VICENTE JOEL HERNÁNDEZ NAVARRO

VICTORIA: 60 MILLONES  PARA LA POBLACION MÁS VULNERABLE—

 Tamaulipeco de pura cepa, originario de esta capital, con más de 40 años de experiencia en el tema de la salud,  el doctor Vicente Joel Hernández Navarro, es egresado de la facultad de medicina de Tampico,  claustro académico en el cual obtuvo su título como médico cirujano.

      Conozco al doctor Vicente Hernández Navarro y  he sido testigo de su credo social en materia de prevención, pero también de procurar aliviar el dolor humano, mediante un estilo de trabajo y una filosofía medica que se centra en dar seguimiento personalizado a los pacientes, destrabando toda suerte de nudos o de viejas resistencias, vicios e inercias en las cadenas de mando.

  Sus padres don Vicente Hernández y la señora Sarita Navarro, (QEPD), originarios de esta capital, supieron formar una familia inspirada en los valores cristianos, y en la congruencia del apoyo y la solidaridad con sus semejantes.

 Desde diversos foros y congresos, VJHN siempre ha buscado la integración social de las personas con Discapacidad.

 Se trata de una persona de trato sencillo  que le confiere una importancia fundamental al estilo de vida relacionado con el ejercicio físico, como una especie de factor de primer orden, en materia de medicina social. Su edad es de 65 años, y corre 10 kilómetros diarios.

    En  el periodo de 1982 a 1985 viaja a España para  estudiar la especialidad  en traumatología  y ortopedia, con formación clínica y quirúrgica en el hospital universitario de la Santa Cruz y San Pablo de la Universidad Autónoma de Barcelona.

En esta misma institución considerada como  uno de los hospitales con una tradición histórica de 600  años en la medicina del país peninsular, el médico victorense Hernández Navarro cursó una subespecialidad en ortopedia pediátrica en el periodo de 1984-1985.

 En los meses de junio y julio de 1991, recibió entrenamiento para la fabricación de aparatos ortopédicos en la ciudad de San Antonio Texas, una actividad organizada por  el consorcio Lux Artificial Limb And Brace Company.

  Del 22 de agosto al primero de octubre de 1992 regresa a la Universidad de Barcelona para participar en un curso de entrenamiento  sobre cirugía artroscópica, impartido por el profesor Félix Escalas LLimona reconocido entre los mejores traumatólogos españoles. En este mismo tema  recibe un entrenamiento a cargo del profesor Raúl Puig Adell, que en vida fue considerado entre los mejores especialistas españoles en cirugía artroscópica de cadera.

   Participa en cursos sobre medicina deportiva y temas de ortopedia en la Universidad de Texas. Es invitado a participar como asistente de la Unidad de Columna del servicio de Cirugía Ortopédica  del 21 de abril al 20 de mayo de 1997, en la Universidad de Barcelona. Concluye una maestría en administración en la facultad de  Comercio de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.

 Posteriormente estudia una maestría en Ciencias Médicas, en la Universidad de Granada España.

     En su faceta laboral, el doctor Vicente  Joel Hernández Navarro ingresa como médico ortopedista y traumatólogo al Hospital General de ciudad Victoria en el año de 1987. Posteriormente recibe nombramiento como Jefe de Hospitalización  del Hospital General. De 1988 a 1994, funge como Director del Centro de Rehabilitación y Educación Especial. De 1989 a 1991, colabora como coordinador en temas de seguros de gastos médicos, y en la firma Seguros América.

De 1990 a 1992, desempeña el cargo de Jefe de los servicios médicos del club Correcaminos de la primera División. En 1995 es nombrado jefe de Traumatología y Ortopedia del Hospital General de esta capital. De 1999 a febrero de 2001,  se desempeña como Subdirector médico de esta mismo nosocomio, emblemático de la salud de los tamaulipecos.

  En 2003 lo nombran como Director del Hospital General de San Fernando. Y del 16 de junio del 2003 al 15 de enero del 2005, tiene un gran desempeño como Director General del Hospital Infantil de Tamaulipas. De enero a octubre del 2005 es Director del Hospital Civil “Doctor Virgilio Hinojosa” de Ciudad Mante.

  De noviembre del 2005  a febrero del 2009, funge como Director General del Centro de Rehabilitación y Educación Especial de Ciudad Victoria. Participa también como Director General de la licenciatura en Terapia Física del Centro de Rehabilitación y Educación Especial de ciudad Victoria.

 Es Director de Atención Médica Hospitalaria de la Secretaría de Salud en el periodo del 2009 al 2016. Y del 2013 al 2016 Coordinador de internado y servicio social de la Universidad Lasalle. Trabaja en su consultorio particular desde 195 a la fecha.

  A lo largo de 35 años, el doctor Vicente Hernández Navarro se ha forjado un amplio historial académico, tanto como catedrático, como también en su destacada participación en Congresos de medicina e impartidor de diversos cursos en lo que constituye  el tema de la traumatología y la rehabilitación.

  El médico Hernández navarro ha sido todos estos años, un entusiasta promotor de la salud de los tamaulipecos, y de manera especial un profesional que ha construido toda una cultura médica y humanista en el renglón de la traumatología y la prevención  de las enfermedades entre las familias de nuestro estado.

El cinco de noviembre de 2020, mediante un decreto ordenado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador,  se estableció reducir de 40 a 20 días de aguinaldo a los servidores públicos de la federación, aplicable para quienes laboran en los niveles de enlace y de mando, de las dependencias y demás entidades de la administración pública federal.

En septiembre de 2020, el gobierno obradorista anunció que por concepto de recortes a algunas dependencias federales, se habían obtenido ahorros por un orden de 26 mil millones de pesos.

   De acuerdo a un decreto expedido por el  gobierno de AMLO, se han llevado a cabo reducciones al gasto público cuyo ahorro llegaría a alcanzar  más de 60 mil millones.

 Se consumó la desaparición de 10 subsecretarías, y ya no se le entregó aguinaldo a funcionarios de alto rango. Ojo con esto porque estamos hablando de los servidores mejor pagados, y por lo tanto no requieren de mayores ingresos a los que ya tienen. En su momento, el mismo Presidente AMLO anunció que renunciaba al cien por ciento de su aguinaldo.  Lo anterior ha permitido al liderazgo de la 4T, invertir mayores recursos para atender a la población más vulnerable del país. De esta forma AMLO es congruente con su narrativa presidencial de, «primero los pobres».

  Atendiendo a esta misma filosofía de meter orden, y establecer prioridades, mediante un acuerdo de cabildo, el ayuntamiento de Eduardo Gattas ha decidido reducir de 90  a 30 días de aguinaldo para los empleados sindicalizados, con lo cual se calcula, se obtendrá  un ahorro de 60 millones de pesos.

  Este importante monto presupuestal, se destinará, según lo ha informado el cabildo victorense, para satisfacer importantes demandas de las familias trabajadoras en los sectores más  necesitados del municipio.

  Lo anterior permitirá invertir en obra pública y social, especialmente para las colonias  consideradas entre las de menores ingresos económicos.

  Como  es lógico suponer, esta medida ha originado protestas por parte del sindicato, y es hora que siguen en pláticas con el actual ayuntamiento victorense.  Hablamos sin duda de un tema complejo y más aun si se cae en el terreno de la politización.

  Lo cierto es que hemos investigado si en el resto de los ayuntamientos de Tamaulipas o incluso del país, se está dando una situación parecida al de ciudad Victoria.

Y la respuesta es que lo que está sucediendo aquí, con una cifra descomunal de 90 días de aguinaldo, parece ser un caso único. No es ocioso resaltar que en este tema específico, el número de los sindicalizados, según datos es de  1480, mientras que los de confianza representan solo 700.

  Algo sucedió en las anteriores administraciones priistas y panistas, para que este tipo de problemas que hoy agobian al ayuntamiento morenista, creciera sin control alguno. Se habla de que los cabildos de la llamada era del prianato, buscaron cobijarse en sus excesos con el silencio  sindical, y ello los llevó a elevarles los días del aguinaldo. Se trata meramente de rumores.

 Lo que sí es un hecho es que  en el ayuntamiento de Victoria,  el sindicato de trabajadores creció de una manera exponencial, mientras que en  el resto del Tamaulipas urbano,  las cosas son diferentes.  Si bien es cierto que en Matamoros, el número de sindicalizados es bastante grande, (se habla de un total de 1960), sabemos que el aguinaldo que se les paga no es de 90 días, como ocurre en Victoria.

  La nota del Mañana  de Reynosa, publicada recientemente con el encabezado de: “Ahorcan a los municipios, sueldazos de burócratas”, ofrece una semblanza de lo que actualmente constituye este tema de carácter presupuestal en algunos ayuntamientos.

  No es el caso de Nuevo Laredo donde los sindicalizados del municipio son  333 empleados, mientras que tres mil 452  son de confianza. Estamos hablando de una planta laboral bastante sana. De igual manera en Reynosa la cifra es de 565 empleados sindicalizados, y de 1420 de confianza.

 De acuerdo a una información publicada el pasado sábado nueve de julio en el periódico El Mañana,  durante los últimos 20 años,  los graves problemas de carácter  presupuestal, han originado que la base sindical de los ayuntamientos tiende a disminuir.