Cd. Victoria, Tamaulipas.- Le dimos una “revisada” a la situación financiera de la Comapa Zona Conurbada (conocida como Tampico), y mire que no deja uno de sorprenderse cómo es que funcionan como empresa (del Estado).

La semana anterior el gobierno de la transformación (Morena) tomó el control del organismo, luego que el Congreso del Estado –con el voto de tres diputadas del PAN- rompió el círculo de protección impuesto por el cabecismo antes de emprender su huida.

Al 30 de septiembre le quedaron a deber a medio mundo, hasta a la prensa que cobró millones en los últimos nueve meses.

El que escribe no es experto en el tema, pero se nos hace que con esos números ninguna empresa –a menos que sea subsidiada “mañosamente” por el gobierno- puede operar con números negros.

Hay más de mil millones de pesos por cobrar, entre ellos por concepto de tarifas del servicio que la gente no paga, hasta “anticipos de nómina” a empleados, algo que no cabe en una instancia oficial. A miles de empleados se les “adelantan” hasta 40 y 50 mil pesos, para irlos descontando en “abonos chiquitos”.

Y no es posible que existan millones de pesos en la cuenta de ”gastos por comprobar”, desde los 400 pesos hasta los 530 mil que dejó, por ejemplo, un tal Alejandro Montes Burgos, a quien se le menciona como “dedo chiquito” del senador Ismael García Cabeza de Vaca.

Hay hasta 230 mil por “cheques devueltos”, es decir, dinero que no se hizo efectivo pero con nombres y apellidos en que cabe reclamo.

En el estado financiero al 30 de septiembre pasado, vemos hasta 70 mil pesos que quedó a deber una supertienda muy conocida (se omite el nombre), por concepto de cobro (tiene la concesión para cobrar recibidos de agua) y que no liquidó.

Incluso faltantes en cajeros automáticos (pago del servicio de agua), también de un banco muy conocido en la zona, en que no se presentaron documentos de justificación. Mencionan hasta 2.2 millones de pesos en “depósitos de más o menos”.

¿Qué pasó con los controles? ¿son préstamos a fondo perdido? ¿acaso para la campaña electoral panista?. Se habla que al gobierno de Américo le urgía retomar el mando porque salía financiamiento para el activismo azul.

Mil cien millones por recuperar –cobrar- es mucho dinero para una empresa que vale poco más de dos mil millones incluyendo las propiedades que tiene.

Igual la descentralizada por concepto de adelanto de incapacidades de sus trabajadores, con la esperanza de que el IMSS le devuelva la lana.

En la Comisión de Agua, en la gerencias de Federico Rivera Schotte y Gabriel Guerra Turrubiates todo el que quiso metió mano ¡y sacó!.
Pagos por servicios profesionales a 60 mil pesos mensuales o contratos por maquinaria que quien sabe si se necesitaría o no, o se hicieron trabajos o no.
Las cuentas por pagar “a corto plazo” quedaron en 347 millones de devaluados. Le deben millones a comercios desde el 2016, desde tubos y maquinaria hasta por el grabado de trofeos de premiso de antigüedad para trabajadores.
Son cuentas impagables e incobrables que se niegan a reconocer, en tanto
cada vez aumentan las tarifas de agua para el aproximadamente 50 por ciento
de usuarios que sí pagan mensualmente sus recibos.
Los comerciantes, industriales y usuarios domésticos le deben al organismo
917 millones de pesos, pero los gerentes se dieron el lujo de distraer dinero en
cuestiones superfluas e innecesarias, entre ellas la prensa, a la que también le
quedaron a deber millones.
Entre febrero y septiembre 30 del 2022 firmaron 57 contratos con medios de
comunicación y productores de spots. Es tanto dinero como el presupuesto que
el Gobierno de Tamaulipas destinará a las prensa en 2023.
Un jefe de Departamento que gana 42 mil, más diez mil de despensa y
premio “de asistencia”; el jefe de capacitación con 51 mil más otros beneficios,
o el “cabo” con 62 mil del águila por mes. Hay “auxiliares” de confianza con 50
mil pesillos.
La prensa regional no está conforme. Les quedaron a deber miles -antes
que los cabecistas fueran echados-, aunque también se “sirvieron bien” en la
época panista.
Sin mencionar nombres, solo unos ejemplos: Elaboración de 54 avisos y
spots para radio, a 17 mil cada uno, lo que da la suma 810 mil pesos (contrato
a dos meses).
Compra de 730 suscripciones por Internet a un costo de ocho mil 317
pesillos cada una, lo que representa una cifra millonaria.
“Avisos a la ciudanía de actividades que realiza la Comapa, y mostrar en
qué trabaja el organismo día a día”, de a cinco mil cada uno, con cuentas de
cien mil o más mensuales, que se estuvieron pagando en los últimos meses.
En el presente año ganaron más las páginas de Internet que los medios
impresos formales. Facturaron hasta 400 mil o más, cada dos o tres meses.
Hasta cinco millones de pesos por “suscripciones” a noticiarios virtuales para el
personal de la paraestatal.
La última en Internet: 91 publicaciones de a 40 mil pesos cada una, que se
pagaron a partir de febrero y hasta septiembre, lo que da la cifra de 3.6
millones ¿para las campañas?.
Ahí la dejamos. Lo que se sabe es que la Contraloría trabaja sobre cada
tema a partir de que llegó el nuevo titular de Comisión Zona Conurbada, y se
fincarán responsabilidades. Un tal Guerra puede ir al bote sin tocar baranda.