CENA DE NEGROS POR: MARCO ANTONIO VAZQUEZ

Payasos…

Estupor, miedo, burla, y los peores sentimientos provoca un cartel que circula en las redes sociales con nombres de payasos, luchadores, jugadores de futbol, otros deportistas y artistas de diversos géneros que se lanzarán como candidatos a diversos puestos de elección popular respaldados por casi todos los partidos políticos.

Según quienes hicieron, repiten o comentan el cartel, el espanto se origina porque ninguno de ellos es político profesional por lo que no esperan buenos resultados de ellos, es más, hasta les atribuyen cortas ideas, poca inteligencia, escasos conocimientos, ignorancia en el mayor de los casos.

La pregunta, seria, muy seria por cierto, es ¿qué han hecho los políticos profesionales como para seguirlos defendiendo y pedir que sean ellos los que aparezcan en ese cartel o de candidatos?, ¿qué podría ser diferente con un payaso al frente de un ayuntamiento que con un político, como Xico González en Ciudad Victoria por ejemplo, que dejó destruida una ciudad?, la verdad tan peligroso es un político ratero o ignorante que un payaso, deportista u artista con las mismas limitaciones.

Más que el cartel, nos debería espantar que cualquier persona puede ser candidato por cualquier partido político sin demostrar que sabe lo que quiere, sin comprobar que es honesta su aspiración de ser presidente municipal o Diputado local o federal.

Por supuesto, da miedo que personajes como Paquita La del barrio se lance de candidata a Diputada y en su primera participación acepte que no sabe ni a que va, que desconoce completamente las funciones que habrá de desempeñar en caso de que gane la elección pero que “confía que sus compañeros y demás habrán de orientarla para hacer una buena labor”.

Dirá usted que es honestidad, que resulta bueno que reconozca sus limitaciones, pero la verdad es que solo se trata de cinismo, la primera muestra de vergüenza que debe ofrecer un político es aspirar a un puesto de elección popular que pueda desempeñar con solvencia y la seguridad de que beneficiará a las mayorías, que no decepcionará a sus electores.

Y no, no se espante porque Paquita, La del barrio, dijo eso, la verdad es que muchos de los políticos son igual de cínicos, unos por aceptar candidaturas a puestos con los que no pueden y otros porque nomás tienen la aspiración de robar con todo el conocimiento que les da el conocer del manejo de presupuestos de manera tramposa.

Ahora, a qué obedece que los partidos políticos postulen a cualquier personaje a cargos de elección popular, pues la razón es simple, lamentablemente para los electores ha sido más importante la popularidad que los resultados.

Y si, por supuesto que pecamos de hipócritas haciéndonos los asustados por esas candidaturas, la verdad es que toda la vida la ciudadanía ha votado más por personajes que le parecen guapos o guapas y tienen carisma que por los conocimientos o resultados que han dado en cada cargo que han desempeñado los mismos, vaya, no nos ha importado si son vulgares saqueadores o saqueadoras, con que estén bonitos o bonitas se han conformado las electoras o los electores.

Eso es lo más triste, los partidos políticos son los más inocentes de todo esto que nos pasa, los grandes culpables somos los ciudadanos y ciudadanas que no participamos en la política, que nomás vamos a votar y luego no exigimos resultados, que descalificamos a priori a los aspirantes por su ocupación sin tomar en cuenta si se ha preparado, si sabe a lo que va o no, y peor aún, nunca nos hemos dado a la tarea de investigar historias de aspirantes a cargos de elección, saber que han hecho, conocer que podemos y qué no podemos esperar en caso de que ganaran los cargos por los que compiten.

¿Le espanta que vayan payasos, de esos que se ganan la vida dignamente haciéndonos reír, en una boleta electoral?, más miedo le debe dar que vayan políticos que no pasan de ser payasos, de los siniestros, de esos que se ríen nomás porque están pensando lo que van a saquear en los siguientes cargos y no porque quieran ser empáticos con usted, darle esperanza de que resolverán problemas y para ganarse el voto…

PREMIA LA UAT PROYECTO DE INVESTIGACIÓN SOBRE PLANTAS MEDICINALES… La Asamblea de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), otorgó el Premio Universitario 2020 “General y Lic. Bernardo López García” en la Categoría Investigación de Excelencia, al Dr. Jorge Ariel Torres Castillo, por un proyecto de biotecnología y diseño de prototipo que servirá a las comunidades rurales para el manejo de plantas medicinales.

El investigador, adscrito al Instituto de Ecología Aplicada (IEA) de la UAT, participó en la convocatoria 2020 del Premio Universitario con el trabajo “Extracción de Metabolitos Vegetales Liposolubles en Fase Oleosa Mediante agitación continua y filtración al vacío”.

A este respecto el Dr. Torres Castillo agradeció a la universidad la oportunidad de emprender proyectos que son para el beneficio comunitario.

Explicó que el trabajo trata sobre la utilización de las plantas medicinales y aromáticas regionales, generando tecnologías para aprovechar mejor este tipo de materiales, entre ellas los procesos de secado.

“Se diseñó el prototipo que se sometió como un modelo de utilidad ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), y que en el futuro sirva para que las comunidades puedan hacer uso en los procesos de manipulación de las plantas medicinales”, apuntó.

Explicó que el proyecto está enfocado, en generar tecnología para un mejor manejo de los materiales vegetales que se colectan de forma tradicional.

“Se generó también un proceso de extracción de metabolitos liposolubles. Tratando de obtenerlos en una fase lipídica como un tipo aceite para aplicaciones cosméticas, industriales o alimenticias, y también ese proceso de presentó ante el IMPI como una patente de proceso y de utilización de esas plantas”, agregó.

Cabe señalar que esta es la segunda ocasión que el Dr. Jorge Ariel Torres Castillo obtiene el Premio de Investigación de Excelencia; la primera vez fue en el 2018, con el proyecto de la utilización de “Quitosano” como un biopolímero para la aplicación agrícola. En el 2016 recibió el Premio Universitario en la categoría de Investigador Joven; y en el 2020, aprobó su ingreso en el nivel 2 del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).