Reforman ley de pensiones en beneficio de los obreros
Sin alharacas, sin ceremonias fastuosas, sin fiestas alegóricas, sin estridencias, la Presidencia de la República, la CTM, el sector patronal, el IMSS y los coordinadores parlamentarios, pusieron en marcha un proceso para reformar el sistema de pensiones de los trabajadores. Las dos principales mejoras que serán expuestas para su revisión en el Congreso de la Unión, son la reducción de 25 a 15 años, como mínimo de cotizaciones para que los trabajadores tengan derecho a una pensión. La otra es que las aportaciones de los obreros al fondo de pensiones permanecerán fijas, no cambian, no aumentan, en tanto que los patrones pagarán en adelante, cuando se apruebe la reforma, 15.88 por ciento sobre los sueldos, en lugar del 5.54 que pagan ahora. Este es un gran triunfo para la causa obrera, porque significa que se le reconoce su aportación al engrandecimiento de México y se le recompensa pero con realismo, no con limosnas, como ocurre ahora. En la conferencia de prensa encabezada por el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador para anunciar esta iniciativa de ley de reforma al sistema de pensiones, estuvieron presentes el dirigente de la CTM Carlos Aceves del Olmo y el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar Lomelín. También hicieron acto de presencia los coordinadores parlamentarios, Ricardo Monreal Avila, por el Senado, y Mario Delgado Carrillo, por la cámara de diputados, así como el director general del IMSS Zoe Robledo. El Secretario de Hacienda Arturo Herrera atestiguó el pacto y estableció un calendario conforme el cual, crecerán gradualmente las aportaciones patronales al fondo de pensiones. Ricardo Monreal no pudo sustraerse a la tentación de emitir una pieza oratoria y aceptó tomar la palabra. Reconoció de entrada, que las AFORES, promulgadas hace 23 años, no funcionaron pues no se cumplieron las expectativas. Agregó que esta reforma corrige las deficiencias del fondo de ahorros para los trabajadores, porque en adelante, las pensiones serán dignas, por montos que respondan a las necesidades de la familia obrera. Monreal sostuvo que las actuales pensiones son raquíticas, precarias, insuficientes pero además, llegan demasiado tarde, cuando el trabajador cumple 25 años de antigüedad con el patrón. Contra lo que pudiera pensarse, la propuesta de reforma al sistema de pensiones de los trabajadores no provino de la CTM, sino que es una iniciativa del gobierno federal. El Presidente López Obrador dijo en la conferencia de prensa, que el presidente del CCE Carlos Salazar Lomelín, merecería una estrellita, por su participación en la elaboración de la iniciativa, donde se invirtió más de un año de deliberaciones, consultas, estudios. Salazar Lomelín ofreció que el incremento de las aportaciones patronales no se repercutirá en los precios de los productos que venden los empresarios, sino que las absorberán. Por su parte, el presidente de la junta de coordinación política de la cámara de diputados, Mario Delgado Carrillo, ofreció hacer su mejor esfuerzo para que la iniciativa de ley tenga tratamiento prioritario y se resuelva cuanto antes en el pleno. Mientras vivió don Fidel Velázquez Sánchez, la CTM fue una central obrera con un poder político formidable. Era el encargado de “destapar” a los candidatos presidenciales, y su influencia se reflejaba en muchas partes. Su hija Nora Velázquez Quintana, esposa del médico victorense Carlos Castro, acompañó al galeno en la aventura de buscar la presidencia municipal de la capital de Tamaulipas. Castro fue así mismo, Secretario de Salud en el gobierno de Manuel Cavazos Lerma, y posteriormente, director general del Colegio de Bachilleres. Bajo la sombra de don Fidel, crecieron en Tamaulipas cacicazgos obrero-políticos como el de su compadre Pedro Pérez Ibarra en Nuevo Laredo, Reynaldo Garza Cantú en Reynosa, Agapito González Cavazos El Tallarín, en Matamoros; Luis Quintero Guzmán en Ciudad Victoria, Diego Navarro Rodríguez en Tampico. A la muerte de Velázquez Sánchez lo reemplazó Leonardo La Güera Rodríguez Alcaine, cacique del sindicato de electricistas, pero le quedaron muy grandes los zapatos; su pasatiempo preferido era pelearse con los periodistas. Luego tomó el mando de la CTM el aristócrata Joaquín Gamboa Pascoe, que tampoco le llegó a las rodillas a don Fidel y su más notable obra ejecutada, fue la develación de una estatua de tamaño natural de él mismo, en el edificio sindical. En el pasado, el sector obrero fue el pilar del PRI, el segmento más importante en las campañas electorales, por las aportaciones que hacía, de contingentes para hacer la talacha pesada. En reciprocidad, el partido oficial repartía senadurías, diputaciones, regidurías entre los dirigentes cetemistas. Ya no. El más reciente líder obrero que despachó en el Congreso local fue Reynaldo Garza Elizondo, de Reynosa.