Por Jesús Hernández García
-De cara al proceso electoral emergen las panaceas a los múltiples problemas que enfrentan municipios de indistintos colores.
Son hombres y mujeres, la mayoría de ellos muy curtidos en temas del servicio público y político, aunque no por esa razón se afirma que su transitar fue bueno, aprovecharon, eso sí, la coyuntura y hoy reaparecen queriendo refrendar, repetir, vaya, en la actividad político-electoral.
Se les ha visto entregando equipo médico, algunos presumiendo la donación de sanitizadores hechizos; otros llevando sillas de ruedas, cubrebocas y gel antibacterial; las imágenes son lastimosas, reflejan su desmedida ambición e incongruencia.
Esos seres “inmorales” son los mismos que aprovechan la miseria de la población, la pandemia provocada por el COVID-19, resulta ser en sus planes campo fértil.
Son tan insolentes que no les ha importado servir a dos amos, haberse mostrado indiferentes a los problemas de la comunidad en su momento les dio resultado.
Ahora de nueva cuenta brotan, como mala hierba, intentando engañar, envolver y hasta queriendo convencer a los potenciales electores de sus buenas intenciones.
Frente a un panorama en donde el jefe o, jefa de familia, luchan por la subsistencia, el pago de los elementales servicios públicos e intentando llevar la comida a la mesa, se manifiestan como buitres y rondan desesperados los distritos electorales.
La población tiene en sus manos la decisión de decir NO a esas “carroñas humanas” y hurgar en opciones ciudadanas, comprometidas con los suyos, echar por el drenaje del oportunismo a esos “vivales”.
UNA TRAS…En Madero lo consideran buen alcalde, aunque no sobresaliente como varios de sus pares, que a diferencia del primero no lo presumen, siguen trabajando y cumpliéndole a sus representados, como si fuera el primer día de gestión.
ADRIAN, se ha preocupado y ocupado en mandar señales hasta el centro del país, considera el edil que de ahí se dará la mejor calificación de cara a las futuras elecciones y él ya levantó el dedo, desea competir, siente que las puede.
Lo que de, ADRIAN , se diga en Madero, es algo que poco le importa, estima que las encuestas aplicables en las semanas previas a los “destapes” le darán una amplia ventaja sobre cualquier mortal, incluyendo aquellos que hoy militan en las grandes ligas, pero que a diferencia de él se mantienen agazapados, cumpliéndole a la Nación y privilegiando el compromiso con quien les dio la confianza.
Madero, es un municipio que enfrenta serios problemas de inseguridad; secuestros, asesinatos de mujeres, asaltos a comercios.
Pocos se explican la razón de que ello ocurra en esa zona privilegiada por la nutrida presencia de la Guardia Nacional, la secretaria de Marina y el Ejército.
La inacción de, ADRIAN, lo hace cómplice de la anarquía; el descontento social no se puede soslayar; la población reclama condiciones de vida, vivir en paz y armonía, pero el edil de MORENA, no se las ha podido otorgar.
Mientras ello sigue siendo el pan de todos los días, ADRIAN, se mantiene en las nubes, haciendo cuentas alegres, dando crédito a sus “asesores de imagen”; el controvertido alcalde que derrotó a un enemigo pequeño en las urnas se erige como el enemigo a vencer, suponiendo que las cartas ya están a su favor y hasta haciendo dibujos en el aire.
1.-UNA TRAS… En donde se manifiesta el progreso, el trabajo, la disciplina financiera y el compromiso por salvaguardar la salud de la población es en los municipios de Nuevo Laredo, Matamoros y Tampico.
Sin dejar de hacer su tarea, de bien gobernar, los alcaldes, ENRIQUE RIVAS CUELLAR, MARIO LOPEZ HERNANDEZ y JESUS NADER, han luchado cuerpo a cuerpo y con el decidido apoyo del Gobernador, FRANCISCO GARCIA CABEZA DE VACA, contra la pandemia.
El COVID-19 les ha querido menguar su fortaleza, los tres, cada uno desde su trinchera, no ha dejado de luchar contra el temible mal.
Si bien las cifras de caídos y heridos son elevadas, los tres alcaldes se muestran decididos a no ceder y el llamado constante a la población ha evitado cifras de alarma, como la que se ha encendido en Reynosa, con cifras que desde hace varias semanas colocan a ese municipio en el privilegiado primer lugar de contagios y muertos.
EL COVID-19 no ha logrado frenar el ímpetu ni el arrojo de los tres alcaldes; la obra pública es plausible, son gobiernos bien administrados y de resultados.
Y sin pretenderlo, los tres munícipes han resultado ser bien evaluados, aunque ninguno se distrae, las condiciones sanitarias no lo permiten.
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