LA VIEJA REALIDAD

LOS HECHOS
POR José Inés Figueroa Vitela
LA VIEJA REALIDAD
En la edición vespertina del Periódico Oficial del Estado fechada el sábado, se
publicó el acuerdo gubernamental con los lineamientos de seguridad sanitaria y de
salud para la reapertura gradual y responsable de las actividades económicas no
esenciales del Estado, complemento del decreto emitido la víspera.
Entre semáforos, fases y niveles de riesgo, habrá a quienes les queden dudas
respecto de lo que en la práctica deberá aplicar a partir de este día, con una
gradualidad que para muchos no acaba de estar clara.
El acuerdo dice contener objetivos, consideraciones, recomendaciones y estrategias
sobre las medidas de prevención y protección de la salud a ejecutar los sectores
económicos, para la reapertura de los establecimientos que ejerzan las actividades no
esenciales en el Estado, para lograr un retorno o la continuidad de las actividades
laborales seguro, gradual y responsable.
Medidas de seguridad, en materia sanitaria, para hacer frente a la nueva realidad
con convivencia segura.
Hablando de cuatro fases, se dice que en la primera sólo entrará en actividades los
servicios de hospedaje a la mitad de su capacidad, mientras los servicios y el
comercio en general, así como los puestos fijos y semifijos operarán al 25 por ciento.
En la fase dos, entrarían al 35 por ciento el apartado eléctrico-electrónico, la
industria en general; al 25 por ciento los tianguis, centros comerciales y turísticos; al
50 servicios, comercios y puestos y al 75 por ciento el hospedaje.
En la tercera fase todos suben otro escalón, solo dando plenitud al servicio de
hospedaje y para la cuarta, la apertura de las actividades económicas es total.
En el caso de los espacios públicos, servicios administrativos para la educación,
clubes deportivos o sociales, servicios inmobiliarios y de alquiler y personas
vulnerables por Covid-19, estarán sujetas a acuerdo del Comité́ Estatal de Seguridad
en Salud, aparte.
En el caso de los trabajadores de las instancias gubernamentales y la Universidad
Autónoma de Tamaulipas quedaron emplazados para reanudad actividades el 16 de
junio.
Si hay cuatro fases, sobre las que el Comité Estatal definirá el momento en que se
pasará de una a otra, los niveles de riesgo a que alude el acuerdo son tres y sobre ellos
se encasillan las definiciones y medidas a seguir.
En el Nivel de riesgo ALTO, impera el trabajo en casa, distancia de 1.5 metros entre
personas que conviven en un centro de trabajo; colocar barreras físicas en las
estaciones de trabajo, comedores, etc.; incrementar la frecuencia en el transporte y
alternar asientos; el personal vulnerable debe trabajar desde casa; establecer
escalonamientos y flexibilización de horarios y turnos; filtro de ingreso y egreso de
trabajadores.
También establecer escalonamientos y flexibilización de horarios y turnos; prestar
atención permanente en la población vulnerable y reforzar de ingreso y egreso de
trabajadores.
En el nivel INTERMEDIO: todo, menos lo del párrafo anterior y en el nivel bajo,
las actividades económicas en general se liberan.
Junto con la publicación de decreto y reglamentos, empezó a circular en redes
sociales una tabla, con emblemas oficiales, que pretende dar claridad a la cobertura y
los tiempos de las medidas dispuestas.
De entrada sobresale la aplicación de un semáforo que atiende más a la capacidad
de dar atención que a la incidencia de contagios; la luz verde aplicará hasta que los
hospitales COVID-19 estén al 40 por ciento de su capacidad; la amarilla hasta el 60
por ciento y la roja, con todas las actividades suspendidas -de nuevo eventualmente-,
si la capacidad instalada rebasa el 60 por ciento de ocupación.
En los plazos, ayer habría concluido la etapa de preparación a la entrada en vigor
de la primera fase, que hoy arranca, para en hipotéticos lapsos de dos semana cada
uno, evolucionar por las cuatro fases de aquí al 26 de julio.
Estimaciones, que no son definitivas, sino que estarán sujetas a la evaluación del
Comité Estatal, quien irá autorizando el tránsito de una fase a otra a como se vayan
presentando las cosas.
Independientemente de las disposiciones se@aladas en los Protocolos -advierte el
documento rector-, los establecimientos deberán implementar las siguientes
estrategias para prevenir y controlar la propagación del SARS- CoV2 (COVID-19):
Orientar y capacitar a sus trabajadores para prevenir y controlar la propagación del
virus en el ejercicio de su trabajo, en sus hogares y durante los trayectos; permitir a
los trabajadores el regreso a casa cuando este, presente síntomas; garantizar la

disponibilidad permanente de agua potable, jabón, papel higiénico, gel a base de
alcohol y toallas desechables para el secado de manos; implementar medidas de sana
distancia en el ámbito laboral, disminuyendo la frecuencia de encuentros y adecuando
los espacios y áreas de trabajo para reducir la densidad humana en ambientes
intramuros y extramuros, así como portar cubre bocas o mascarilla facial en nariz y
boca.
El incumplimiento a los presentes lineamientos, podrán ser sancionados conforme a
la legislación aplicable, sentencia.
Durante los siguientes 14 días naturales -plazo de la primera fase- deberán publicar
los protocolos para la nueva realidad con convivencia segura en actividades
económicas no esenciales que iniciarán a partir de las fases II, III y IV según
corresponda.
Las reglas cambian y los mariachis callan.
Estamos en pleno ascenso de la incidencia de contagios, pero ahora esa no es la
máxima, sino la capacidad para atender a los pacientes en las instancias médicas
dedicadas a la pandemia.
El sábado se reportaron 90 casos de contagio y el jueves habían sido 88, marcando
la curva ascendente sostenida.
El fin de semana hubo noticias muy lamentables en el sector público oficial y el
panismo, al consumarse el deceso de LUISITO VEGA, el Director de Recursos
Humanos del CONALEP Tamaulipas, víctima del coronavirus.
El sure@o, fue muy apreciado en los círculos institucionales y dentro del panismo;
estaba en la alta estima de su jefe, el Director General del sistema educativo,
AGUSTÍN DE LA HUERTA MEJÍA, quien le dedicó una amplia despedida en redes
sociales.
En la relación pandemia-personajes públicos, el fin también se confirmó el contagio
de la regidora neolaredense BLANCA CECILIA PADILLA MARTÍNEZ, esposa del
diputado -también panista- MANUEL CANALES BERMEA, quien desde una
semana atrás estaba en confinamiento por resultar positivo al virus.
Además del matrimonio, su hija también resultó contagiada, todos punto menos que
asintomáticos, así que permanecen en su hogar, confinados, esperando salir del
contagio.
Lo que hizo escándalo, fue el brote registrado en el Hospital General de Reynosa,
donde 23 integrantes del cuerpo médico resultaron contagiados, aunque no había

reportes de propagación de virus hacia los pacientes.
Reynosa es la ciudad más poblada del Estado y era de la que menos reportes de
contagio había, entre las cinco grandes concentraciones urbanas de Tamaulipas,
además de ser donde más hospitales COVID se han instalado, con dos por parte del
Estado y otro operado por Médicos sin Fronteras, en torno del Gimnasio
Multidisciplinario de la UAT.
El diputado federal maderense, ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO, el fin de
semana mantuvo las jornadas de apoyo a sectores vulnerables y sectores productivos
de su distrito.
Las vísperas, en la capital del país tuvo una agenda intensa, en la que encabezó los
parlamentos abiertos relacionados con la iniciativa de revisión a fideicomisos que
implican recursos por 91 mil millones de pesos, amén de las reuniones virtuales de la
bancada, de la Junta de Coordinación Política y la Comisión de Presupuesto y Cuenta
Pública que preside.
Con mucha sensibilidad política y apertura, desactivó lo que algunos analistas
perfilaron como “bombas por estallar en la cámara”, relacionado con el tema de los
fideicomisos.
Así con lo del Fondo de Desastres Naturales, como con los del deporte y de Ciencia
y Tecnología, sin quitar el dedo de la necesaria revisión, compartió la posibilidad de
mejorar esquemas a favor de los ciudadanos.
Diputado de alto vuelos.