Gaby Regalado, heroína de Morena

-Y El Moyo, es el villano

-Lo que sigue es recuperar el Congreso

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Raúl Hernández Moreno

En un fallo inédito, el Tribunal Electoral de Tamaulipas (TRIELTAN) declaró inválida la integración de la  Diputación Permanente de la Cámara de Diputados con la cual se caen acuerdos y dictámenes aprobados por la bancada panista, como la Súper Fiscalía.

Con este fallo, la Unidad de Inteligencia Financiera no estará subordinada a la Fiscalía  de Justicia de Tamaulipas. Tampoco los GOPES se subordinarán a la Fiscalía.

El recurso de impugnación lo presentaron la diputada morenista de Nuevo Laredo, Gabriela Regalado y Marco Antonio Gallegos, que tendrían que  haber encabezado la diputación permanente y no el diputado panista  Félix Moyo García, de Nuevo Laredo.

Ambos legisladores se quejaron de que no fueron convocados a la Junta de Coordinación Política  del Congreso donde la mayoría panista se despacho con la cuchara grande y en la cual Félix Moyo García, el pastor de los diputados panistas,  decidió que el PAN se quedara con la Comisión Permanente.

Además la sesión se convocó el 30 de junio y se prolongó al 1 de julio, lo que es violatorio de la ley que establece que el 30 de junio es el último día para sesionar.

El magistrado Edgar Iván Arroyo  propuso darle la razón a los diputados  Úrsula Mújica y Gustavo Cárdenas, de Morena y MC, que también impugnaron los acuerdos de la Súper Fiscalía.

La tarde de hoy sesionó el TRIELTAM y en ella el magistrado René Osiris Sánchez Rivas comentó que los diputados panistas se excedieron en sus funciones pues rebasaron los límites establecidos en la ley y violaron los derechos políticos de los diputados Gabriela Regalado y Marco Antonio Gallegos.

El funcionario declaró que el Tribunal tiene competencia para decidir este caso, pues hay jurisprudencia  de la Sala Superior, además de que se violaron los derechos políticos de los legisladores.

Con este fallo, quedó al descubierto los abusos del diputado panista Félix Moyo García, que se ha convertido en un lacayo del  gobernador Francisco García Cabeza de Vaca y lo quiere de candidato presidencial.

Cuando Morena presentó la impugnación ante el TRIELTAM, El Moyo  se burló de los diputados opositores y dijo que no conocían de derecho. Resultó lo contrario.

Este fallo es el inicio del desmantelamiento de los cambios legislativos con los cuales Cabeza de Vaca y la diputación panista pretenden acotar a Américo Villarreal para ponerle obstáculos a partir del 1 de octubre. Pero construyeron ese andamiaje con cartas de una baraja que ya se cayó.

La diputada Gabriela  Regalado se convirtió en la heroína de Morena, y de Tamaulipas, al promover y ganar el recurso de inconformidad con el cual el Tribunal Electoral de Tamaulipas, echó abajo la Súper Fiscalía.

El recurso lo presentó junto con su compañero de partido, Marco Antonio Gallegos.

Y mientras Gaby es la heroína, el chico malo de esta historia, el villano, el depredador, el castigador,  es el diputado Félix Moyo García quien promovió la Súper Fiscalía en un afán de obstaculizar al próximo gobierno y para blindar a  su patrón, su jefe,  su amo, Francisco García Cabeza de Vaca.

No deja de ser curioso que los dos principales actores de esta  historia representen a Nuevo Laredo, pero una quiere lo mejor y el otro no le importa  Tamaulipas, y menos Nuevo Laredo,  solo quiere quedar  bien con su amo.

Triste destino el de El Moyo, de paladín de la democracia a promotor de la prolongación de una  tiranía. Luego de seis años, esa tiranía se agotó.

El año pasado, previo a las elecciones, pocos apostaban por Gabriela  Regalado que enfrentó en las urnas al alcalde con licencia, Enrique Rivas Cuéllar, quien llevaba  ganadas cuatro elecciones al hilo. De regidor, diputado local y dos veces alcalde. ¿Cómo pensar que una regidora poco conocida le pudiera ganar?

Rivas  gastó carretadas de dinero, a diferencia de Gaby que a  falta de recursos, realizó una campaña a ras de tierra, con mucho contacto con la ciudadanía.

Entre los chicos de la prensa no faltó quien dijera que Rivas   ganaría con paliza. Lo adulaban, lo chuleaban, querían quedar bien con el alcalde y nunca le hablaron con la verdad. Se equivocaron en el pronóstico,  el apaleado fue Rivas. Gaby le ganó con 16.87 puntos de ventaja, equivalentes a 9 084 votos.

Rivas nunca acepto su derrota,  jamás felicitó a Gaby por su victoria, su compañera de cabildo. Incluso el equipo de Rivas  deslizó la teoría de que la derrota era el resultado de una traición al interior  del PAN, promovida por quien era alcalde en funciones, Arturo Sanmiguel Cantú, cuya hija participó como candidata a diputada en el distrito 2 y sí ganó.  Se habló de que se promovió el voto cruzado. Es una  teoría endeble que lo que buscaba era  justificar la derrota y nada más.

Con el fallo del Tribunal Electoral, al gobernador Américo Villarreal se le facilita la gobernanza. Todavía hay muchos obstáculos por  derribar, entre ellos,  recuperar la Junta de Coordinación Política que el PAN se robo de manera cínica.

La Junta de Coordinación debe estar en manos del partido que quedó en el primer lugar de las votaciones,  que fue Morena. Pero el PAN compró  a diputados de Morena, reformó  la ley y se apoderó de la Junta de Coordinación.  Es una acción anticonstitucional que se va a revertir en los próximos meses.

A Américo y Morena, los eligieron 730 mil tamaulipecos. Y las mayorías mandan, aquí y en China.

Morena va por la recuperación del Congreso y por el rescate de Tamaulipas, que el PAN deja en ruinas.