Ni con el pétalo de un barrote
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Como es ordinario, poco a poco las campañas
políticas van a subir de tono.
En Miguel Alemán el moreno Américo Villarreal Anaya echó un vistazo a los
gobiernos estatales “que se desviaron del camino”, y cuyos funcionarios deben
ser castigados.
Los que precedieron, en efecto, están reprobados por omisos y permitir la
corrupción.
Esto nos hizo recordar los mensajes de campaña del 2016 cuando el PAN
era oposición y el PRI administraba Tamaulipas, con una imagen deteriorada
por tanto desatino y saqueo del erario sin pudor alguno: “Se les acabó la fiesta
a los corruptos”, decían los celestes.
Limpiar la casa, centímetro a centímetro eran las promesas, sin llegar a
“cacería de brujas” (al final solo castigaron a los burócratas de a pie por ser
priístas).
Resumían las promesas en que “no habrá borrón y cuenta nueva”, para los
que preparaban el despegue rumbo al Nuevo Reino de León u otras partes del
país con las talegas llenas.
Meter al bote a los ladrones del presupuesto, a los “peces gordos”, acabar
con el “diezmo” en los contratos, eliminar a los aviadores eran los
compromisos, en los cuales creyó buen parte de los empadronados y se fueron
a votar por ellos.
El desenlace es que el “moche” se duplicó por cuatro y nadie fue a dar tras
las rejas. No los molestaron ni con el pétalo de un barrote.
Muchos pensaron que sería una buena administración, la mejor de
Tamaulipas, que voltearía los bolsillos de señalados de corrupción como
Manuel Rodríguez Morales, ex jefe de Obras Públicas, o el de Administración,
Fernando Salinas Zambrano; del ex secretario de Finanzas Silvestre Abrego
Adame; “Don Teofilito” Norberto Treviño, o René Salinas Treviño de Desarrollo
Urbano.
Los negocios más pingües se hicieron, se siguen haciendo en Salud y
Educación, pero dos tímidos citatorios de Contraloría a Teofilito y Diódoro
dieron por cerrada la estrategia contra el desvío de dinero.
Ni en pensamiento los “gordos” pisaron bote. Fue detenido un “perra flaca”
de nombre Cristóbal “N”, quien no se mandaba solo ni autorizaba pagos. Le
cargaron dos mil millones que deben estar en otras chequeras y no la de él.
Hoy se voltea la tortilla, el escenario es el mismo del 2016. Se presta para
un discurso fuerte de la oposición, en este caso Morena, que nada tiene que
perder y todo que ganar.
Será el mismo de hace seis años con actores diferentes y un partido nuevo.
Desde las gradas el público vuelve a ver la novela, salvo el segmento que
acaba de cumplir los 18 años.
“La narco política se acabó en Tamaulipas” decían los discursos azules,
que son válidos en la contienda en marcha.
Igual de válida la promesa de alternancia pacífica, la posición de no
doblarse ni venderse ante las circunstancias del entonces gobierno priísta de
ponerle precio a cada cabeza, en una operación de estado dirigida por el
secretario General de Gobierno, Herminio Garza Palacios.
Se acostumbra que el titular de la segunda esquina de Palacio es el jefe de
campaña del partido en el poder. Lo fueron Herminio Palacios, Toño Martínez
Torres, Homero Díaz Rodríguez, Jaime Rodríguez Inurrigarro y las pasajeras
“Paloma” Guillen Vicente y Laura Garza Galindo.
Y hoy, con sus descalificaciones sin mesura, sin cuidar las formas o
cohibirse por el que dirán, el jefe de la instancia política, Gerardo Peñas Flores,
ya calificó y juzgó un incidente en que resulto baleada una oficina que utiliza el
alcalde victorense Eduardo Gattás Báez.
En lugar de guardar las formas como funcionario, se dejó ir con tranchete
en mano sobre el munícipe que, de buena fe, le hizo caso y fue a la Fiscalía a
presentar demanda como se lo había recomendado.
Aunque sea jefe de campaña como sus antecesores, no debería hacerlo a
lo descarado porque “la gente lo va a notar”.
Algo de razón debe tener Gattás cuando dijo a los reporteros sobre el
comentario del regio avecindado en la frontera: “Estoy seguro de que si le
hubieran balaceado su oficina, hubiera salido corriendo para Reynosa”.
Decíamos que poco a poco irá subiendo el tono, como subió en aquella
primavera del 16´ con un discurso frontal pero “arreglado” para no tocar ni con
el pétalo de una reja a los que se fueron.
No es lo mismo ser cantinero que borracho. El respetable –como hace seis
años- decidirá quien quiere que dirija los destinos de este sufrido y saqueado
Tamaulipas por el siguiente sexenio.
Por lo pronto hacemos votos porque no siga la violencia, amenazas y balas
en intereses de los actores, y que Don Gerardo cierre la boca y deje que las
campañas corran libremente como mandan los protocolos electorales. Tiene
sus filias pero el corazón no piensa.
En el lado opuesto, Va por Tamaulipas, andaba por Matamoros el jefe
nacional priísta, “Alito” Moreno Cárdenas, en apoyo al candidato César “Truko”
Verástegui. Luego se dirigieron a Valle Hermoso para continuar con el
proselitismo.
Jueves de sesión del IETAM. Designarán a sendos moderadores de los
debates de candidatos a Gobernador. Hasta donde se sabe habrá paridad de
género. En el primer encuentro va mujercita (primero ellas) y en el segundo
varón.