Morena va por Auditor del Estado
-Morenistas tienen sed de venganza
-Los panistas fueron crueles, creyendo que durarían mil años
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Raúl Hernández Moreno
Iniciado el 2023, los diputados de Morena se han echado a cuestas el objetivo de destituir a Jorge Espino Ascanio, titular de la Auditoría Superior del Estado, al que acusan de ser cómplice de las raterías de alcaldes de extracción panista.
Espino es además el papá de Luis Espino Acosta quien en julio de 2022 ofreció 5 millones de pesos a regidores del cabildo de Reynosa, a cambio de que lo ayudarán a desconocer al alcalde Carlos Peña Ortiz.
El diputado Isidro Vargas explicó que para destituir a Jorge Espino se necesitan dos terceras partes de los votos del Congreso, es decir, 24 de 36, los que Morena no tiene.
En cambio se buscarán reformar la Constitución para facilitar la salida de Espino, aunque los números no le alcanzan.
Morena tiene sed de venganza contra el cabecismo y el PAN y esto está más que justificado. Cuando los panistas tuvieron el poder actuaron peor que los criminales, fueron soberbios y mamones, convencidos –como los nazis- que el suyo sería un gobierno de mil años y que podían hacer lo que les diera la gana.
Todavía está fresco en la memoria de los tamaulipecos que cabecistas y panistas quisieron desaforar a la diputada Úrsula Salazar, quisieron destituir al alcalde de Reynosa Carlos Peña y luego intentaron meterlo a cárcel. También quisieron llevar a prisión a Américo Villarreal Santiago, Eduardo Gattas, Carmen Lilia Canturosas, Manuel Muños Cano, Carlos Cantuorosas y muchos más otros morenistas a los que pretendían someter con presiones.
Los panistas fueron cu… y por eso ahora Morena les responde con la misma moneda. Y que nadie pretenda que los de Morena respondan colocando la otra mejilla. Eso es romanticismo, como bien lo escribió el filósofo Bertrand Russel, en su libro “Por qué no soy cristiano”.
En las últimas semanas, Morena y sus aliados han sacado adelante 5 reformas importantes para los tamaulipecos, pese a los obstáculos de los legisladores del PAN, que en la última sesión no asistieron con el objetivo de que no hubiera quórum y se suspendiera la reunión, pero les falló el plan pues estuvieron presentes 19 diputados y se eliminó la Súper Fiscalía.
En otro tema, en los primeros seis días de la campaña de senador, Morena se ha dedicado a incrementar el posicionamiento de su candidato Ramón Gómez Leal, apareciendo en un spot, en tanto que el PAN y el Verde están conscientes de que van a perder y le apuestan a posicionar al partido, olvidándose de sus candidatos.
El PRI en cambio utiliza sus spots para vendernos la idea de que son un partido revolucionario, pasando por alto que no se puede ser revolucionario y guardar silencio frente a lo que no están de acuerdo. Los priistas harían bien en leer por lo menos a Silva Herzog, a Jean Meyer o de perdido a Enrique Krauze, para que entiendan el concepto de revolucionario.
Y no hablamos de individualidades, como el intransigente de Emiliano Zapata, el feroz Álvaro Obregón, el bragado Francisco Villa o un Felipe Ángeles, Benjamín Hill, Pascual Orozco, Francisco J. Mujica, Salvador Alvarado y un largo etcétera.