Raúl Hernández Moreno
Al rendir un informe por sus primeros 100 días de gobierno, la presidenta municipal Carmen Lilia Canturosas Villarreal declaró que el rescate de Nuevo Laredo está en marcha y su transformación es irreversible.
Sostuvo que en su gobierno se combate la corrupción y la simulación. Destacó el hecho de que Nuevo Laredo fue el primer municipio del país en promover la vacunación anti-Covid para niños de 7 a 12 años y que se han aplicado 24 mil vacunas, incluyendo a otros segmentos de la población.
De un presupuesto de 3,365 millones de pesos, más de la tercera parte, 1,340, se destinaron este año a la obra pública, privilegiando el alumbrado público, el agua potable, el drenaje, el alcantarillado, la construcción, mantenimiento y limpieza de calles, parques y jardines y la recolección de basura.
“Tienen mi palabra, vamos a transformar a Nuevo Laredo en el Nuevo Corazón de Tamaulipas, un municipio ideal para vivir, próspero y en paz, del que todos nos sintamos orgullosos”, precisó.
Para reconstruir la estructura de los colectores se van a invertir 364 millones; en la infraestructura educativa se van a invertir 30 millones y adicionalmente se entregarán más de 20 mil becas, con una bolas de 120 millones de pesos.
Con el programa de Brigada Médica Asistencial se brindaron más de 7,200 servicios con un ahorro de más de dos millones de pesos para los beneficiados y se atendió a 90 pacientes que no tienen forma de ir al hospital, con un ahorro de de 260 mil pesos.
Del mismo modo, se ejercieron programas para el bien de la ciudad como: Bazar para talento local, mantenimiento a parques y jardines, recolección de llantas, deschatarrización, feria de empleo, pavimentaciones y repavimentaciones, alumbrado de calles y colonias.
En otro tema, más tardó Luis Enrique Cantú en despreciar a Maki Ortiz y decir que ya estaba expulsada del PAN y no la querían de vuelta, que César Verastegui en declarar que le daría gusto que la ex alcaldesa de Reynosa se sume a su proyecto.
Ante la declaración, a Cantú no le quedó otra que recular y señalar que el pre candidato está en su derecho de sumar a los que quiera.
Allá en Reynosa, los ex alcaldes Oscar Luebbert y Humberto Valdez Richaud anunciaron su respaldo a Américo Villarreal Anaya y si alguien se enojó fue el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, que no olvida que el primero es el responsable de que no haya tenido continuidad el cabecsismo en Reynosa, pues Cabeza quiso heredar la alcaldía a Gerardo Peña Flores y este perdió ante Luebbert.
En Reynosa, Luebbert y Ramón Gómez Leal van a ser claves en la campaña de Américo pues ambos mueven a miles de seguidores, además de que Morena sigue muy bien posicionado. Si Maki Ortiz y su cachorro se suman a Morena, el PAN va a salir trasquilado en ese municipio.
La formalización de la alianza PAN-PRI no quiere decir que automáticamente todos los priistas se sumen a los azules. No imaginamos al ex gobernador Eugenio Hernández dando instrucciones a sus muchos o pocos seguidores para que apoyen a Verastegui, el brazo ejecutor de Cabeza de Vaca. Muchos tamaulipecos están convencidos de que Eugenio es un perseguido político de Cabeza, como lo son Carlos Canturosas, Maki Ortiz y Leticia Salazar, a quien ya perdonó. Esa persecución terminará en unos pocos meses.
En cambio, seguramente Egidio Torre si bajara línea para que apoyen al PAN, como lo hizo desde hace más de un año con Yahleel Abdala.
Uno de los ex colaboradores de Eugenio, Manuel Muñoz Cano está apoyando a Américo, desde su liderazgo en el Partido Verde.
Esto apenas empieza y ya hay políticos saltando de un partido a otro y esto se va a poner más intenso durante la campaña constitucional.