Metida de pata que “empina” a Morena
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Cuando la mañana parecía tranquila en el
mundillo de la política estatal, un traspiés del delegado de Programas
Federales, Rodolfo González Valderrama, llamó la atención y generó una
revuelta que no terminará pronto.
Se presentó en Palacio de Gobierno a dialogar, por dos horas, con el
Gobernador Francisco Javier García. La pregunta es ¿qué mensaje quiso
mandar?¿por encargo de quién?. No es algo que le pudo haber encomendado
el Presidente.
Hay varios ángulos, uno de ellos, es que lo “chamaquearon” los inquilinos
de Palacio estatal. Lo invitaron y cayó como corderito para engordarles el caldo
y posible hasta ayudarles en la próxima elección, lo cual le daría la categoría
de traidor.
¿Quién gana de este encuentro? Los panistas, el grupo en el gobierno y
sus empeños en conservar el poder a como dé lugar, luego del revés del
pasado junio.
¿Quién pierde? En primer lugar el partido Morena, al exponer ante la
opinión pública una relación que ya se interpreta de complicidad con los
opositores, y perjudicará la imagen de quien sea el candidato al Palacio del 15
Juárez. Tendrá que dar explicaciones a la ciudadanía.
¿Relación institucional? No la necesitó en tres años el “cuñado incómodo”
JR Gómez Leal, aun cuando le cancelaron eventos. Más bien suena como una
alianza.
Otro ángulo de la especulación es que lo mandó su eterno jefe y amigo
Ricardo Monreal Avila, a “abrir brecha” rumbo a la presidencial del 2024 con
una candidatura -independiente o de algún “quichillo” (partido)- contraria a
Morena y al presidente AMLO.
De hecho, Monreal está fuera del primer círculo de Palacio Nacional. Ya
rompió lanzas con la Cuarta Transformación y, en la praxis, le quitaron el
control del Senado.
La tercer vertiente es que, sabiendo ya que no será el candidato al
Gobierno del Estado, Valderrama fue a entregarse para trabajar por los vientos
del cambio rumbo a la elección de 2022, para hacer perder al abanderado que
en su tiempo designe el Presidente, perdón las encuestas.
Fue un encuentro atípico que, ante la falta de información oficial, caben
todo tipo de historias, pero todas coinciden en que el primer mal se lo hace al
partido. El respetable comenzará a dudar de la honorabilidad de su gente y la
lucha contra la corrupción.
En la medida en que los morenos se acerquen a los vientos del cambio,
recibirán el rechazo ciudadano el próximo cinco de junio ¿lo entenderá el
sociólogo?.
El señalamiento más benigno para el tampiqueño es que lo hizo por
inocencia, un inexperto en asuntos políticos al nunca haber aparecido en una
boleta electoral.
El más rudo es que fue a traicionar a la 4T y a ofrecer en charola de plata la
cabeza de quien será el futuro candidato.
Y quería Rodolfo que su encuentro se hiciera público. La concertó en
Palacio de Gobierno donde siempre hay periodistas. Por si hubiera duda, lo
publicó en sus redes en que dice “refrendamos la voluntad de mantener la
coordinación en esta tarea”, la de los 14 programas federales.
Habrá que preguntarles ya más detenidamente a los reales prospectos a la
gubernatura, qué opinan sobre el tema. A la hora de escribir estos comentarios
no lo habían hecho.
Ahora bien ¿lo mandó el Presidente? Ingenuidad. Quienes conocen al
señor López opinan que no es alguien que transe con sus enemigos. Su
pensamiento y su lucha son reales y no mentiras.
Primera conclusión: Rodolfo dio una metida de pata que le costará votos a
Morena y su futuro candidato al Gobierno.
Segunda: Dentro de dos años el hoy delegado de programas federales, o
embajador de AMLO, junto con Alejandro Rojas Díaz Durán, serán los
principales operadores de Monreal rumbo a la Presidencia de México, en
contra del partido fundado por López Obrador.
Como dicen, no soy Inés pero por ahí es. El tiempo nos dará la razón en
que el motivo no es una “relación institucional”. Si seguimos pensando mal, la
última sería que RGV aparezca como candidato del PAN ¡A la gubernatura!.
Andar de un partido a otro, “chapulinear”, no es nuevo en los últimos
tiempos. Hombres y mujeres cambian de camiseta de la noche a la mañana,
como se dio el fin de semana con Doña Beatriz Collado Lara, quien le dio adiós
al PAN luego de haber disfrutado de sendas diputaciones, una federal y otra
local.
Tenía 20 años de militancia, según publicó. Primera deserción importante
en los dominios de Don Cachorro ¿quién sigue?. No esperó a que la
expulsaran como a otros 95 que en el último proceso trabajaron para los de en
frente.
Por cierto, Collado –junto con otros ex panistas- apareció en Morena, en
Altamira, al lado de Maki Ortiz Domínguez.
Se preparan para la consulta por revocación de mandato, en que
Tamaulipas debe aportar por lo menos 80,880 opiniones para que tenga
vinculación.
El pronóstico es que en la tierra del Nuevo Santander, el señor López
rebasará ese tres por ciento para que se quede de Presidente, y termine.