DESDE ESTA ESQUINA…

MELITON GUEVARA CASTILLO.-

Hay muchas formas de explicar, o describir, al ser humano: para unos es la medida de todas las cosas; otros nos dicen que es él y sus circunstancias; en fin, que al ser humano para entenderlo hay que verlo en su contexto, en los múltiples factores, como su personalidad, lo que tiene a la mano… bien dicen, por ejemplo, que si queremos conocer a alguien, basta con darle poder y se manifestara tal y como es: se marean en un ladrillo, afirman.

En pocos días Eduardo Gattas asumirá la Presidencia Municipal de la capital tamaulipeca. Culmina así, una lucha que inicio hace varios años, incluso inicio en el PRI; donde sufrió derrotas y que continuo, luego, en MORENA con una incursión fallida, se quedó en el “ya merito”. Aprendió bien la lección, se puso listo, trabajo territorio y población, y su triunfo fue indiscutible. Ahora si, como dicen en el rancho, ya está listo para darle sabor al caldo.

¡YA BASTA!

Elección tras elección siempre fue lo mismo: las promesas de los candidatos, incluso hasta del partido en el poder, era exclamar: ¡Ya basta!, si, ya basta de corrupción, de malos gobiernos. Por eso, incluso a nivel presidencial o gubernamental, sexenio tras sexenio se daba un deslinde… precisamente, para mostrar que se era diferente. Era normal, por decir, que se investigaba y se castigaba a alguien: así, por decir, a Pedro Silva lo enjuiciaron con Manuel Cavazos Lerma como a Pedro Carrizales en tiempos de Tomas Yarrington.

Ese ya basta, sin embargo, se ha convertido en un clamor en los tiempos actuales. Las expectativas de un buen gobierno municipal en aras de regresar a la capital su otrora calidad en sus servicios públicos, hizo que el voto de castigo convirtiera en Presidente Municipal a Xicoténcatl González Uresti: fue candidato independiente y ofreció las perlas de la virgen, perdió y a la vuelta el PAN lo hizo su candidato y gano: nunca entendido que el poder es para servir a la población, fue frívolo, desgobernó. Y su relevo, Pilar Gómez, enderezo un poco el rumbo, pero no el suficiente.

ESTADO ACTUAL.

¿Cómo está la ciudad? Creo que, hacer la pregunta, resulta odioso, puesto que buena parte de la población, basta con que salga de su casa, haga un recorrido a pie, o en vehículo, de las calles aledañas a su domicilio, y va a encontrar en principio que las calles están llenas de baches; se van a topar con que, en las esquinas o en determinados lugares hay bolsas y bolsas de basura; en tanto que, en otras áreas de la ciudad, aún siguen padeciendo el problema del abasto del agua. Y, no se diga, el estado en que se pueden observar buena parte de los espacios públicos recreativos.

Claro, hay que ser consciente, de que esta situación no inicio ayer, ni antier, ni el año pasado. Empezó hace años: los gobiernos priistas se dedicaron a robarse el dinero del pueblo, a hacer malas obras; a beneficiar con contratos a sus familiares y amigos, de tal suerte que el dinero, si, el dinero del pueblo, pues no alcanza para todos… y en ciertos casos, solo alcanzo para darle vida de ricos a unos cuantos. Así, el pueblo le dio oportunidad a otros y, ¿Qué cree?, ¡Resultaron peor!

CAMBIAR Y AVANZAR.

Ese es, sin la menor duda, el contexto y las circunstancias de Eduardo Gattas: ¿Está preparado para, esa esperanza de un mejor gobierno, se convierta en realidad? ¿Tendrá habilidad, conocimientos, para administrar el tesoro municipal y hacer que cada peso rinda más? ¿Tendrá en sus colaboradores apoyo para cumplirle a Victoria? Recuerdan: Xicoténcatl ofreció tener a los mejores y si, fueron mejores, para no hacer bien las cosas y, eso sí, cumplir expectativas de ambición. El caso es que la ciudad, sus colonias y barrios, sus comunidades rurales, bien que saben las consecuencias de un mal gobierno.

La población tiene, sobre el gobierno municipal de Gattas, amplias y extraordinarias expectativas: en principio, que no van a robar, va a rendir el presupuesto; que saben y conocen del gobierno municipal, que por eso sabrán a que ventanilla, sea estatal o federal, deberán acudir para bajar recursos y programas; que no van a engañar al pueblo, a Usted, a mí, a mis vecinos. Por eso, connotados panistas, con cierta ironía, publican en las redes sociales: ya faltan pocos días para que pase el camión de la basura, para que vayan desapareciendo los baches, para que se termine el problema del abasto del agua.

DIOS NOS AGARRE CONFESADOS.

A nivel municipal los victorenses por años, décadas, conocimos a los gobiernos priistas; que cada trienio fueron, por decir, más y más voraces, hasta dejar en la ignominia, destrozada, descuidada a la capital y el voto de castigo llevo al PAN al poder. No pudieron con el paquete. La cuestión que, ahora, la oportunidad es para Eduardo Gattas, para MORENA. ¿Serán mejores o peores?