Se afirma en un dicho popular que «ladrón que roba a ladrón (a), tiene mil años de perdón» y eso precisamente es lo que observamos en el perdón concedido por la presidenta municipal de Reynosa, Maki Ortiz, a su Coordinador de Redes Sociales, un puesto inexistente formalmente en el Reglamento de Administración de Reynosa, pero que existe en la realidad, opera con mucho personal y consume cuantiosos recursos. Aníbal «La Verruga» Flores fue corrido por la presidenta Maki Ortiz. Estuvo varias quincenas fuera de la nómina e incluso fue exhibido en la prensa local «mascando barrote», encarcelado por hacer desmanes en la vía pública, todo esto por cortesía del Secretario Técnico, Hugo Ramírez, a quien le falló la intriga para deshacerse de La Verruga, porque el recomendado que contrató para suplir a Aníbal Flores, salió más sonso que el regenteador de los chamacos encargados de defender a la presidenta y esparcir toneladas de estiércol digital en las redes sociales, para intentar desacreditar a los críticos de la alcaldesa. Para contener y desvirtuar las severas críticas que los reynosenses hacen a Maki Ortiz, para intentar neutralizar o desviar la información sobre los múltiples casos de corrupción que hay en la administración municipal y el DIF Reynosa, volvieron a contratar a la Verruga Flores y a toda la runfla que lo acompaña. Reinstalaron a su esposa y a la veintena de imberbes que se alquilan para ofender e insultar, desde el cobarde anonimato, desde cuentas «fantasmas». También le permitieron a la Verruga Flores seguir cobrando los tres «convenios» de publicidad con medios de comunicación inexistentes. Tres supuestos portales de noticias por los que factura cien mil pesos en cada uno, haciendo un total de trescientos mil pesos por mes, que la presidenta autorizó que se pagarán, en el entendido de que el dinero se utilizaría realmente en contratar publicidad en redes sociales, para difundir la imagen de su Junior, Carlos Peña Ortiz. Lo que se aprecia en las diversas plataformas o redes sociales difícilmente llega a un costo de mil pesos diarios, pero póngale usted el doble, digamos que la Verruga le mete dos mil pesos por día a «pautar» las notas de Makito en redes, eso nos arroja un total de sesenta mil pesos por mes, dando un excedente de doscientos cuarenta mil pesos mensuales «para el vencedor», para el ganón Aníbal Flores, quien como escribí al principio, tiene mil años de perdón. Me pregunto si estará enterado de este tema el nuevo, -aunque no tan nuevo, porque ya estuvo ahí-, Jefe de Prensa del gobierno municipal de Reynosa. A la Verruga ya lo encarcelaron por briago y escandaloso; a futuro puede regresar a la Jail escul por diversos delitos propios de la función pública.