Flaco favor le hacen al gerente de la COMAPA de Reynosa, Jesús Ma «El Chuma» Moreno, sus «cuates», cuando repiten, a propios y extraños, que Chuma será el candidato a la presidencia municipal de Reynosa porque «Francisco se la debe». Afirman los seguidores del reynosense avecindado en Laredo (y Mission) que desde el principio del «proyecto» de encumbrar al hoy gobernador Cabeza de Vaca, Chuma le aportó recursos millonarios, propios, de sus amigos y familiares y de varios empresarios, a su compadre que hoy habita en la Casa de gobierno de Ciudad Victoria y agregan que en algún momento de ese trayecto que ya supera las dos décadas de batallas políticas, le prometió al Chuma hacerlo presidente municipal de Reynosa.
Como si no fuera suficiente el daño que hacen al divulgar la promesa que le hizo Cabeza de Vaca a su compadre y amigo Chuma Moreno, promesa que tratándose de política es irresponsable hacer, ingenuo creer y muy difícil de cumplir, pues en estos temas intervienen muchos factores que inciden en la toma de desiciones, más perjuicios a la causa de su líder hacen los chumistas, al expresar que deben tener cuidado para que a Chuma si le cumplan, y no le hagan lo mismo que a varios otros que dejó vestidos y alborotados con la misma promesa de hacerlos candidatos a la presidencia de Reynosa.
El gerente de la COMAPA de Reynosa parece que ha olvidado el consejo que recomienda «ayúdate que yo te ayudaré», y ha fincado su aspiración de ser alcalde de Reynosa en la promesa de su compadre como único recurso, pues por el lado de abonarle a ese propósito con una buena actuación como mandamás en el organismo operador del sistema de agua potable y alcantarillado, no hay mucho que decir en el aspecto positivo, y sí mucho que comentar en el negativo.
Chuma Moreno no entiende que quienes ya cuentan con un servicio, no sienten agradecimiento por las obras para renovar la infraestructura que ya utilizan y pagan. Lo digo por las obras para substituir tuberías que por muchos rumbos de la ciudad se llevan a cabo en estos días. La ciudad parece bombardeada por las cuadrillas de la COMAPA y por los contratistas que realizan trabajos a la paramunicipal a ritmo de tortuga, como si los rivales del Chuma les hubieran pagado para demorar las obras y causar molestias a los reynosenses, que tienen que improvisar rutas y dar grandes rodeos para trasladarse de un sitio a otro.
A pocos meses de definir la candidatura a presidente municipal, el Chuma Moreno le complica a su compadre Cabeza de Vaca el cumplimiento de esa promesa de hacerlo presidente (dando por buena esa versión de sus fans).
Se la pone difícil con la ciudad llena de zanjas, con obras largamente demoradas, con cortes de agua frecuentes, con múltiples fuentes de aguas negras, con obras grandes inconclusas, con licitaciones amañadas, con trafiques administrativos, con indemnizaciones millonarias para los familiares de sus compinches, con exceso de personal realizando tareas políticas, con funcionarios que además de «robar poquito» se atreven a exhibir a los que roban mucho.