–EL MATCH DEL SIGLO: GERARDO PEÑA CONTRA JR EN REYNOSA—–
Todo parece estar ya perfilado, para que en el ring reynosense del 2021, se lleve a cabo la llamada pelea del siglo por la alcaldía que será la más disputada de toda la entidad: el poderoso líder del Congreso local, Gerardo Peña Flores, tratará de comerse, políticamente hablando, una costillita de rib eye morenista, llamado José Ramón Gómez Leal.
La clave parece ser la alcaldesa Maki. Pero dados los enconos entre los protagonistas, lo que se vislumbra es una batalla campal.
¿Será el JR, un hueso duro de roer?, eso no lo sabemos, pero lo cierto es que, el superdelegado, tendrá un rival político, justo a su medida: nada menos que el brazo derecho del gobernador. Y a quien, con justicia, se ha llegado a considerar como el hijo político de la Marca Tam.
Mientras que la historia por venir, nos da la razón, déjeme contarle lo sucedido en estos días. Se trata de acontecimientos directamente relacionados con el escenario que le estamos adelantando:
De acuerdo a fuentes bien enteradas, el pasado viernes 28 de agosto, después de los eventos del Presidente AMLO en Reynosa, el Superdelegado JR recibió una llamada de su jefe Gabriel García Hernández, preguntándole de manera directa si tenía compromisos políticos con el gobierno estatal panista, específicamente con el jefe político tamaulipeco. Y se sabe que, la respuesta del funcionario federal, fue de carácter afirmativo.
Todo lo anterior, se derivó de los saludos que el ejecutivo estatal le envió al JR, como una especie de reproche velado por las manifestaciones de ciudadanos en su contra. Y es que, al parecer, previo a la gira presidencial, se había dado un acuerdo con el alto mando en Tamaulipas, donde José Ramón se comprometía a impedir toda muestra de golpeteos políticos, o de agresiones verbales por parte de grupos de las colonias, como finalmente sucedió.
Esto ha provocado que, en el primer despacho de palacio Nacional, se hayan encendido focos de máxima alerta sobre la supuesta lealtad que José Ramón Gómez Leal dice tener hacia la causa obradorista. Un día sí, y otro también, el super delegado da muestras de que está arreglado y bien pactado con la marca Tam.
Esa sería la causa principal de que, hayan decidido ponerlo a prueba, enviándolo como candidato a la alcaldía de Reynosa, donde para tener que ganar, se tendría que confrontar con el cabecismo.
De hecho, el rival que con mayor fuerza se perfila por el PAN, para disputar la urbe reynosense, es el actual líder del Congreso estatal, Gerardo Peña Flores, considerado como el brazo derecho del gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Se sabe que Gerardo ha estado llevando a cabo un excelente trabajo de gestoría y de apoyo social, en las colonias reynosenses. En el Comité ejecutivo estatal del PAN tamaulipeco, se le considera hoy por hoy, como el mejor cuadro competitivo para ganar la alcaldía reynosense.
De hacerse realidad, esta hipótesis, en el sentido de que Peña Flores sea postulado por la urbe del origen cabecista, considerada como el bunker político por excelencia del grupo actualmente en el poder, entonces no habría duda de que, el panismo iría con todo, en la urbe reynosense.
Si usted me pregunta, porque el JR iría por la alcaldía de Reynosa, en 2021, y no por la candidatura a gobernador en 2022, la respuesta es que, primero quieren ponerlo a prueba, en materia de lealtad política, pero también, en cuanto a su efectividad en las urnas.
José Ramón no está todavía preparado para un proyecto político de carácter estatal. Nunca ha ganado un cargo de elección popular. Su intento más inmediato, fue como abanderado por el ayuntamiento reynosense, y fracasó ante la hoy alcaldesa Maki Ortíz Dominguez.