LOS HECHOS
POR José Inés Figueroa Vitela
NADA ES SUFICIENTE
Cuando el presupuesto de que se dispone resulta insuficiente para llenar las
aspiraciones particulares, si no es para emprender una actividad que será redituable,
autofinanciable y generadora de dividendos garantizados, se recomienda no “encharcarse”
con créditos.
Eso, que aplica para las personas físicas y las empresas privadas, en algún momento
permeó hasta el oficio público, pero de un tiempo a la fecha parece haberse desplazados y
hay quienes piensan, que hasta inspiraciones inconfesables han acompañado en no pocas
ocasiones al frenético endeudamiento público.
De administración a administración, se ha dicho en no pocos casos, hay gobiernos
que se han endeudado para amarrarle las manos a su sucesor, cuando se han dado cuenta no
seguirá su línea y los relevos, de manera socarrona han multiplicado el endeudamiento,
para burlarse de su antecesor, sin pensar en la condición en que dejarán a quienes vengan
después.
Al paso de los sexenios y los trienios, los compromisos de deuda han ido a la alza,
creciendo de manera intrínseca, proporcional e inversa al alcance de lo que se hace con los
dineros prestados.
Así, si una deuda de 8 mil millones de pesos le alcanzó a EUGENIO HERNÁNDEZ
FLORES para construir una torre de 24 pisos, un Palacio Legislativo, tres centros de
convenciones, un centro ferial, dos bulevares, dos libramientos, un complejo horizontal de
oficias, plazas y jardines, entre otras obras, EGIDIO TORRE con 5 mil millones de deuda
le cambió el piso a dos plazoletas.
La sola operación de renegociar la deuda pública estatal para poder acceder a
nuevos financiamiento, significó duplicar los compromisos, ya no en montos, sino en
tiempo, pues sin bajar el tamaño de los pagos, estos se seguirán haciendo no por 15, sino
por 30 años.

Según el último reporte de la deuda pública directa del Estado, correspondiente al
primer trimestre de este año, el año pasado no hubo contratación de nueva deuda, aunque
hubo variadas autorizaciones del Congreso para hacerlo.
Fue en el 2 mil 18 cuando se contrataron los últimos créditos, cinco, por montos que
van de los 497.3 millones de pesos, a los mil 650 millones, pasando por otro de mil y dos
más cercanos a mil millones cada uno.
5 mil 103 millones de pesos, en números cerrados, más accesorios, que
regularmente no se contabilizan como deuda, porque se pagan aparte en el trámite, fue la
deuda que se sumó al Estado en el 2 mil 18, luego de la duplicación del plazo, para pagar lo
que ya se debía.
Con un saldo de 14 mil 355 millones de pesos al 31 de marzo, si se ejercen los 4 mil
600 millones de pesos que están en litigio y se solicitaron “para atender la pandemia y otras
cosas”, más lo que falta del “ahorro” de lo que no se gastó en concluir el penal nuevo para
Victoria y ya está autorizado para conseguirse en financiamiento y redireccionarse a otras
obras y compras de terrenos, ahí se estaría consumando un desdoblamiento más de los
compromisos del Estado con los bancos.
Esa es la deuda directa; la indirecta es otra y a ella quiere abonarle aparte CHUCHO
NADER y los diputados locales.
Ayer la Comisión de Finanzas, Presupuesto y Deuda Pública del Congreso del
Estado, aprobó el dictamen a la solicitud del ayuntamiento de Tampico, para contratar un
empréstito hasta por 100 millones de pesos “para invertir en infraestructura turística dentro
de la Laguna del Carpintero”.
Tampico –al primer trimestre de este año- mantenía una deuda con BANOBRAS
por cerca de 84 millones de pesos, a los que se sumarán esos cien, si como es de esperarse,
en sesión plenaria –seguramente hoy mismo- la mayoría de los diputados avalan el
dictamen de ayer.
En comisiones, además de los dominantes panistas, las representaciones del PRI y
Movimiento Ciudadano se mostraron generosos en conceder la aprobación, así que será
muy de esperarse sigan así en el pleno, solo con la resistencia de MORENA, por supuesto,
insuficiente para cambiar destino.

Esperemos que tales inversiones en verdad abonen a generar mas turismo, derrama
económica, impuestos, economía para que la comuna también fortalezca sus ingresos, de tal
manera que cubriendo esos compromisos, no se sacrifiquen otras acciones a favor de los
tampíqueños.
Si no, ese será un “mal negocio”, al menos para el pueblo; cuando sepamos de los
contratistas que ejercerán las obras a pagarse con tales dineros, podremos abundar al
respecto.
Los demás sujetos de interés –otros ayuntamientos a través de quienes se engordará
la deuda estatal indirecta- deben apurarse, porque el año entrante habrá elecciones y en esos
ejercicios, no se contratan préstamos; acaso se ejercen, pero no se gestionan, cabildean ni
contratan.
Hay quienes lo ven muy fuerte, para quedarse con la candidatura de MORENA y
ganar la alcaldía reynosense; en trabajo, hace mucho que le sacó amplia ventaja a muchos
que solo de dientes para afuera expresan aspiraciones, pero no tienen deferencia alguna,
como para convencer a los potenciales electores.
Esperan que “el partido” les haga la campaña y los lleve de la mano a sentarse en la
alcaldía.
En Reynosa, la alcaldesa MAKI ORTIZ sigue maniatándose sola, cuando, como en
el caso de los regidores y las sesiones, para empujar a su hijo a relevarla, lo lleva de la

mano a repartir despensas en las colonias, al tiempo que de manera pública convoca al
pueblo a recogerse en casa, para acotar los contagios que allá se han disparado.
Ser o no ser… esa es la cuestión.
En Nuevo Laredo, en su informe semanal de los lunes, el alcalde ENRIQUE RIVAS
CUELLAR lamentó los nuevos contagios y defunciones por la pandemia, e insistió en su
llamado al pueblo para que cumpla al pie de la letra, con disciplina, las medidas de higiene
preventivas y las restricciones como el ¡Quédate en casa!
Aparte, confirmó que hoy y el viernes, el programar “Mi Escuela, Digna, Moderna y
Saludable” seguirá entregando nuevos espacios educativos.
La administración municipal neolaredense este año se propone ejecutar 250 obras,
de las que 75 ya están en proceso, incluidas pavimentaciones, drenaje, alumbrado y un
parque recreativo.
Bien reza la conseja popular: obras son amores, no buenas razones.