Realidad que duele: Habrá muchos muertos
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Ya son dos. A lo mejor para cuando usted lea
estas líneas serán tres o más los gobernadores contagiados por el virus ¿qué
podemos esperar los mortales?.
Como que no hemos dimensionado las consecuencias de la pandemia.
Todavía pensamos que “a mi no me tocará”, cuando el problema está aquí y
pronto nos rebasará.
Ya está dicho por la OMS que aproximadamente el 80 por ciento de la
población del orbe, de México y Tamaulipas resultaremos contaminados, la
mayor parte con síntomas menores, otros graves y muertos, muchos muertos
por falta de capacidad de los hospitales para brindar atención.
No hay camas –Imss, Issste, civiles y particulares- para atender a los
enfermos ordinarios, menos para la emergencia del Covid-19.
El gobierno federal no ha tomado el toro por los cuerpos. Los estados
hacen lo que pueden y algunos municipios se muestran apáticos ante el
problema. No estamos empujando juntos.
Mientras en otros países los presidentes y sus colaboradores, ponen el
ejemplo y donan un mes de sueldo para dar de comer a los que ya no tienen
por estar aislados en sus casas, en México López Obrador no ha dicho una
palabra. Aprieta el aguilita de los 108 mil que cobra íntegros cada 30 días.
Necesita invitar a secretarios, gobernadores, presidentes municipales, a la
alta burocracia a hacer lo propio, aparte de la iniciativa privada.
No existe voluntad de aplazar siquiera las declaraciones de Lolita
(Hacienda), menos de condonar impuestos o conceder tres meses de cuotas
obrero patronales del IMSS, para ayudar a los patrones a superar la crisis
económica.
Se quedará en la congeladora del olvido la petición del senador cuerudo
Ismael García Cabeza de Vaca, de que la CFE “done” tres meses por consumo
de energía eléctrica.
En otros municipios mexicanos la autoridad hace colectas entre
empresarios y público en general, para llevar despensas a los que viven “al
día”. En Tamaulipas alcaldes como Enrique Rivas Cuellar, de Nuevo Laredo, le
echan la culpa al gobierno federal de no actuar.
Algunas ciudades instalaron albergues o cobertizos hospitalarios
provisionales para atender a posibles pacientes. Aquí no.
Con esta “encerrona” de las familias en sus casas, está confirmado que
aumenta la generación de basura hasta en un 50 por ciento. Pero los
municipios no se aplican a resolver el problema. En la capital de Tamaulipas el
sábado quedaron sectores sin atención, no “pasó” el camión.
Algunas ciudades protegen con eficiencia al personal de limpieza:
Desinfectan todos los días los camiones con un lavado a presión; tienen baños
para el personal y los dotaron de guantes, gafas, gel y mascarillas. Aquí siguen
“a mano limpia”
La mayor parte de los estímulos y apoyos pueden hacerse desde los
municipios. Los Gobernadores tienen poca capacidad de maniobra. En
impuestos solo disponen de Nóminas y al Turismo.
Por ejemplo, varias entidades decretaron la condonación del cien por ciento
de nóminas a quien tenga menos de 20 empleados; el 50 por ciento para los de
40, y el 30 por ciento de descuento a quienes disponen de más personal.
En los primeros de abril el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca
dará a conocer el plan de estímulos y apoyos para que la población y los
sectores activos, hagan frente a la contingencia. Es de esperar que incluya los
impuestos señalados, con “algo”.
Las auditorías y el pago de saldos atrasados en derechos vehiculares,
alcoholes, comercio y costo de notificaciones (cartas de no adeudos), es algo
que mantiene preocupados a no pocos causantes.
Otras entidades ya pusieron en marcha el “borrón y cuenta nueva”,
perdonar lo atrasado y ser inflexibles en lo que viene. Es algo que podría incluir
el Gobernador en su proyecto de contingencia económica.
Son los ayuntamientos los que más pueden conceder, decíamos,
comenzando con el predial que de por sí en la presente administración
(Victoria) la gente ha dejado de cubrir. Abonar tres meses a los “cumplidos”
sería una opción de estímulo para incitar a los demás a pagar.
En varios municipios de México los comerciantes ambulantes y semifijos
recibieron ya la condonación de cuotas mientras dure la emergencia.
No son pocos los que otorgaron beneficios en las cuentas de agua potable,
un servicio que constitucionalmente los ayuntamientos están obligados a
proporcionar.
Si todos le echamos ganas, los que menos no saliendo de sus casas, la
epidemia traerá menos consecuencias. No quisiéramos ver que el gobierno se
vea obligado a implementar el “toque de queda” que ya está en otras partes del
mundo.
Ni ver que, en los siguientes meses, tenga que generar empleo como en la
gran depresión: Pagar por hacer zanjas para luego taparlas.
Después de tantas críticas recibidas, a lo mejor tiene razón el alcalde
capitalino Xicoténcatl González Uresti en lo que afirma en un video: Habrá
muchos muertos. En una realidad aunque duela.
Menos rudeza emocional para el respetable era anunciar el donativo de las
tumbas, cajas para muerto y actas de defunción para todos los fallecidos. A
nadie le gusta que le digan que se va a morir, en tanto que de regalo recibimos
hasta puñaladas siempre y cuando no sean tan profundas.
En estos momentos estaría recibiendo aplausos.