Matamoros, Tam.- Ante la inminente llegada de la Navidad, el alcalde Mario Alberto López Hernández dijo que estos son momentos de reflexión, de unidad familiar, de estar bien con Dios, pero también agregó “son momentos de unidad en Matamoros”.
En el mensaje que dirigió a las miles de familias matamorenses que asistieron al desfile “Amor a la Navidad”, el Presidente Municipal se refirió a que en Matamoros se está haciendo un gran esfuerzo por cambiar la imagen de la ciudad, a través de acciones impulsadas por el gobierno, particularmente en obra pública.
A pesar agregó, de que unos cuantos, no quieran aceptar que estamos haciendo las cosas bien, que estamos hablando de frente y con la verdad a la gente, de quien estamos recuperando la confianza.
El Alcalde López Hernández se refirió a que desde el 1 de octubre del 2018, inició su trabajo para cambiar Matamoros, primero añadió, recuperando la confianza de la gente y segundo, aplicando eficientemente sus recursos que confían a la administración pública a través del pago del Impuesto Predial.
Estamos avanzando, pero necesitamos más, necesitamos estar unidos todos, porque solos no podemos; necesitamos del apoyo de todas la familias para que nuestros hijos y nietos reciban el fruto de nuestro trabajo al dejarles una mejor ciudad.
También se refirió a que en Matamoros se necesita paz espiritual, “pero también necesitamos paz laboral; los empresarios están invirtiendo en Matamoros; necesitamos cuidar mucho nuestros empleos, necesitamos querer más a Matamoros, y todo lo demás, Dios nos dará”.
López Hernández destacó que como Presidente Municipal tiene un mandato de Dios y del pueblo, “ustedes mandaron el 1 de julio del 2018 y ese poder que tiene el pueblo, no permitan que que nadie se los quite ya, porque de aquí en adelante el que manda es el pueblo, y no unos cuantos”.
Yo me considero uno de ustedes, me identifico plenamente con las familias por eso les pido que hagamos fraternidad con el gobierno actual porque de esa manera nos irá mejor a todos como ciudad, concluyó.
Ese mensaje el Presidente Municipal también los dirigió a cientos de familias que se congregaron en la calle 9 para disfrutar de una posada navideña, en la que se quebraron piñatas y se entregaron dulces por parte de los comerciantes establecidos en este lugar turístico.