Basureros y predios enmontados son un grave problema para la salud

 


Por René Gutiérrez G.


 

Sector salud verificará estas propiedades

Los tiraderos clandestinos en predios no aptos para ello, se han convertido en un grave problema para la salud de los ciudadanos reynosenses, porque estos insalubres lugares, están llamados a convertirse en centros de contagio de las enfermedades del dengue,  Zika y Chikungunya, infecciones que pueden ser mortales en caso de no combatirlas con un tratamiento médico adecuado.
La Secretaría de Salud es una de las instituciones mayormente preocupadas por la apertura de basureros por toda la ciudad, sobre todo en lugares baldíos o deshabitados, pues personas inconscientes e insalubres los toman como sitios para abandonar, mejor dicho, para convertirlos en focos de infección y más, cuando otros irresponsables les prenden fuego contaminando el medio ambiente.
Los neumáticos con la presente lluvia pudieron haberse llenado de agua y ésta se llena de larvas de insectos que más tarde se convierten en moscos o zancudos, entre ellos el Aedes Aegypti que es el mosco transmisor de las enfermedades nombradas líneas arriba, por lo tanto es urgente, que la ciudadanía colabore con las autoridades de salud y no tengan en su domicilio cacharros o llantas que puedan congregar agua y aunque el agua es un líquido vital para el ser humano, pero cuando ésta está contaminada causa problemas de salud.
Así las cosas, dijo la coordinadora de epidemiología del sector salud, doctora Gloria Leticia Doria Cobos, “que, es necesario tener más conciencia de lo que puede ocurrir con este tipo de tiraderos orgánicos o inorgánicos, pues al descomponerse, el hedor que emanan, se vuelven insoportables y no solo son insoportables, sino, que son intolerables y portadores de muchas enfermedades”, terminó advirtiendo.
Por último recalcó, que, cuando alguna persona sienta dolor de cabeza, dolores musculares, náuseas, fiebre, debe de inmediato acudir ante cualquier médico para que le diagnostique el tipo de enfermedad contraída, y siga el tratamiento que le indique, intensificando esta plática, de que jamás debe uno auto medicarse, pues uno no sabe que malestar haya contraído y tome un medicamento no apto para su organismo.